Doctor en Ciencias Políticas y Sociología
Universidad Complutense de Madrid.
Profesor Asociado de Ciencia Política
Universidad Nacional de Colombia
INTRODUCCIÓN
Diversos son los análisis que se ocupan de la explicación de lo que ha dado en llamarse globalización, por ello interesa aclarar como se le entenderá a lo largo de este escrito.
Las dimensiones económica, política y cultural, aparecen contenidas en varias de las definiciones que sobre este hecho existen, sin embargo los énfasis difieren enormemente.
Tales énfasis se ocupan de resaltar elementos propios de cada realidad. En el análisis económico: el crecimiento y la expansión del comercio mundial, la multiplicación de las inversiones extranjeras y la dinámica de los flujos financieros; en el análisis político: las zonas geopolíticas, el cuestionamiento al estado-nación y la hegemonía en el ejercicio del poder; en el análisis cultural: los intercambios de conocimientos, las migraciones y los acercamientos entre las personas por medio de la red informática.
Todos estos elementos tienen importantes y decisivas consecuencias en el plano social y es a través de estos cruces de impacto como se puede señalar que la globalización seria un proceso de determinación múltiple, en el que se presentan de manera simultánea varios hechos desencadenantes.
Se podría decir que es un proceso multidimensional y que para poder comprenderlo, hace falta la idea de la integralidad.
En términos económicos, no hay ninguna duda que la producción industrial en los países desarrollados se ha dirigido hacia procesos productivos altamente tecnificados, en los que prevalece la automatización y la inclusión de la robótica.
Según esta tendencia, seria la tecnología un elemento clave en la explicación económica y este factor adquiere libre movilidad en la época de la globalización, asociándose a la informática y a la venta libre de bienes y servicios, dinamizando el comercio a escala mundial. Lo anterior sin mencionar por ahora las consecuencias sociales de tales hechos.
En términos políticos, las multinacionales y los organismos financieros internacionales, rebasan con sus actuaciones las fronteras nacionales y condicionan a los gobiernos receptores, cuestionando con su poder, los conceptos de autonomía y soberanía, así como la normatividad jurídica que rige a los estados nacionales. Lo anterior sin mencionar por ahora las consecuencias de tales hechos.
En términos culturales, el conocimiento y la información se difunden por el mundo gracias a la red, las personas se desplazan de unos países a otros, intercambiando costumbres y valores, varias naciones reciben flujos migratorios considerables que están relacionados con el trabajo, el turismo y la búsqueda de nuevos centros como lugar de residencia. Lo anterior sin mencionar por ahora, las consecuencias de tales hechos.
Con la idea de la integralidad en la comprensión del proceso de la globalización, se pretende llamar la atención de que no se trata exclusivamente de una realidad económica y que por lo tanto las implicaciones y consecuencias no son reducibles solamente a lo económico.
No sobra advertir que algunos autores tienen sus reservas frente a la idea de la integralidad, ya que según ellos esconde una falta de posición frente a hechos palpables de dominación y hegemonia. No obstante, este artículo comparte la idea que la globalización es un proceso complejo, como se verá más adelante.
GLOBALIZACIÓN Y ECONOMIA
En el texto titulado “La economía mundial y el desarrollo” de los autores Juan Claudio Rodríguez y Ferrera Massons, se puede leer:
“La globalización o mundialización de la economía se refiere al hecho de que en los últimos años ha existido un crecimiento continuado del comercio internacional, de las inversiones extranjeras y de los movimientos financieros internacionales en general. La lógica del sistema económico imperante, el capital, precisa actualmente del conjunto del espacio mundial para reproducirse.[1]”
La definición anterior coincide en todos sus puntos con las ideas del Banco Mundial, organismo que señala que a pesar de no existir una definición precisa y ampliamente aceptada, el concepto más común o básico de globalización económica:
“seguramente es el hecho de que en los últimos años ha aumentado vertiginosamente la parte de las relaciones económicas entre personas de distintos países.[2]”