Por:
José Manuel
Mojica
Politólogo
Universidad Nacional de Colombia
Grupo de
Estudios en Ciencia Política y Administración Pública- GECIPAP-
Incubación, elaboración, fundamentación y defensa de la
idea de ordenamiento territorial en el pensamiento de Fals Borda:
Antes de que surgiera explicitamente el
interés por el ordenamiento territorial en Fals Borda con la publicación de
“Historia Doble de la Costa”, sus trabajos precedentes se centraban en los
campesinos. Esto lo llevó a dirigir su atención hacia un problema estructurante
de las dinámicas territoriales de Colombia, el problema de la tenencia de la
tierra y de las luchas campesinas. Se puede clasificar esta etapa como el
periodo de incubación de la idea de ordenamiento territorial desde
finales de 1950 hasta finales de 1980. Sin
duda, estos trabajos no estaban al margen del contexto histórico del país. La
reforma agraria impulsada por el ex-presidente Carlos Lleras Restrepo, la
Asociación Nacional de Usuarios Campesinos, las autodefensas campesinas, la
re-ordenación del territorio por la Violencia; todo ello, en un país
eminentemente rural para aquel entonces.
Al respecto, se pueden señalar libros
como “Campesinos de los Andes” (1955), “El hombre y la tierra en Boyacá” (1957)
“Historia de la Cuestión Agraria en Colombia” (1975), etc. En la obra de “Campesinos de los Andes” se
manifestaba ya su intención de abordar temas propios del ordenamiento
territorial actual. El análisis de la configuración del vecindario, la vecindad
rural o la vereda, para el caso de
Saucío, Chocontá Cundinamarca. Sin olvidar otros temas del libro como son la
descripción del proceso de poblamiento y de la relación del campesino con la
tierra. Frente al concepto de vereda:
“..la vereda o vecindario de Saucío
puede definirse en función de cinco factores ecológicos: 1) la vereda es un
grupo social, etnocéntrico, autónomo y politicamente cohesivo; 2) al mismo
tiempo, depende de la sede municipal para la satisfacción de necesidades
religiosa, económicas y administrativas: 3) tiene intercambio ecológico de
sostenimiento con una región rural topográficamente delimitada; y 5) se
identifica por un toponímico funcional”
Durante los debates generados por la
reforma agraria de Lleras Restrepo a finales de los 50, Fals Borda planteaba
reflexiones propositivas que cuestionaban las bases del ordenamiento
territorial en el sector rural. En los debates dijo que la reforma agraria
tenia que resolver los siguientes problemas (ver ensayo titulado “La reforma
agraria”):
●
La
distribución de la propiedad: Fijar limites para los latifundios y los
minifundios. Realizar una política de redistribución de la tierra pasa por
establecer limites maximos para la acumulación de la tierra, y unos limites
minimos en la aotmiazación de la misma. El latifundio impide el acceso de los
campesinos a los medios de producción, y la atomización no se obtiene de una
pequeña porcion lo suficiente para subsistir.
●
El
problema de los arrendamientos rústicos: Los altos costos de la tierra, a parte
de impedir el acceso de los campesinos en la apropiación de los medios de
producción, los obligaba a pagar arriendos costosos que no facilitaban el
desarrollo de sus actividades económicas.
●
El
registro y el deslinde de la propiedad rural: La falta de control en la
titulación y delimitación de las tierras es fuente de conflictos, de allí la
importancia de definir con claridad los mecanismos para el registro de
propiedad y sus delimitación con las tierras vecinas
●
El
problema de la productividad de la tierra y la capacitación del hombre: La
concrentación de la tierra ha llevado a una baja productividad de la misma, por
lo que los lotes baldios deben ser aprovechados económicamente. Para mejorar
las condiciones económicas de los campesinos, el Estado debe incentivar buenas
prácticas agropecuarias en la formación de la población rural.
●
Autonomía
regional y acción comunal: Aunque no menciona la descentralización en este
punto, pues de este concepto no se hablaba en el país en aquella fecha, Fals
Borda invitaba a garantizar una mayor autonomía de los municipios para la
administración de sus territorios y a la organización campesina para la
resolución de problemas locales.
Con la publicación de “Mompox y Loba”,
primer tomo de la obra “Historia doble de la costa” podemos hablar de un
segundo periodo: la elaboración de la idea de ordenamiento territorial en el
pensamiento de Fals Borda. Este periodo de elaboración de la idea culmina con
la exposición que presentó en el Foro Regional de Mompox en 1987 “Ordenamiento
territorial e integración regional en Colombia”. Posteriormente, se puede
hablar del último periodo de fundamentación y defensa del ordenamiento
territorial.
El proceso de elaboración de la idea de
ordenamiento territorial estuvo marcado por el trabajo “Historia Doble de la
Costa”, con el cual se postulan preliminarmente los conceptos de región y
provinicia. Gracias a este trabajo es
que Fals Borda comprende la importancia de abordar las dinámicas territoriales
para hacer análisis de la práctica política, las ideologías y planificación
social y económica (Mompox y Loba).
A finales de los 70 y la década de los
80 muchos trabajos empezaron a confluir en la critica al esquema territorial del
país, ya sea través de diferentes planteamientos como la descentralización, la
democracia local, la crítica al modelo de desarrollo, etc (Orlando Fals Borda
señala muchos de estos trabajos en su artículo “El reordenamiento terrritorial:
intinerario de una idea”). Sin olvidar que a nivel mundial el Ordenamiento
Territorial como disciplina científica e instrumento de planificación estaba
constituyéndose en las dinámicas político-administrativas. Al respecto, se
puede consultar la Carta Europea de Ordenación Territorial de 1983.
En aquel entonces, los conceptos de
región y provincia eran vistos por Fals Borda desde el concepto de “formación
social”, como un conjunto de expresiones geográficas, políticas y temporales
concretas, que se mueven en un espacio y en una estructura social determinada
(Mompox y Loba, p. 18b). En este sentido, las regiones son elementos dinámicos
de una formación social, ya sea ésta última de tipo colonial o de un orden como
el estado-nación. Elemento dinámico como espacio geográfico claramente
delimitado porque hay cierta homogeneidad ecológica y socio-cultural. La historicidad de la región como tal presneta
a su interior un desarrollo desigual que plantea cierta diferencia, donde hay
agrupamientos específicos y comunidades que persisten a los dieferentes cambios
de formaciones sociales. (Mompox y Loba).