jueves, 1 de noviembre de 2012

EL ORDENAMIENTO TERRITORIAL EN EL PENSAMIENTO DE ORLANDO FALS BORDA: APUNTES DE UNA LECTURA TODAVÍA INCONCLUSA


 Por:
José Manuel Mojica
Politólogo Universidad Nacional de Colombia
Grupo de Estudios en Ciencia Política y Administración Pública- GECIPAP-

Incubación, elaboración, fundamentación y defensa de la idea de ordenamiento territorial en el pensamiento de Fals Borda:

Antes de que surgiera explicitamente el interés por el ordenamiento territorial en Fals Borda con la publicación de “Historia Doble de la Costa”, sus trabajos precedentes se centraban en los campesinos. Esto lo llevó a dirigir su atención hacia un problema estructurante de las dinámicas territoriales de Colombia, el problema de la tenencia de la tierra y de las luchas campesinas. Se puede clasificar esta etapa como el periodo de incubación de la idea de ordenamiento territorial desde finales de  1950 hasta finales de 1980. Sin duda, estos trabajos no estaban al margen del contexto histórico del país. La reforma agraria impulsada por el ex-presidente Carlos Lleras Restrepo, la Asociación Nacional de Usuarios Campesinos, las autodefensas campesinas, la re-ordenación del territorio por la Violencia; todo ello, en un país eminentemente rural para aquel entonces.
Al respecto, se pueden señalar libros como “Campesinos de los Andes” (1955), “El hombre y la tierra en Boyacá” (1957) “Historia de la Cuestión Agraria en Colombia” (1975), etc.  En la obra de “Campesinos de los Andes” se manifestaba ya su intención de abordar temas propios del ordenamiento territorial actual. El análisis de la configuración del vecindario, la vecindad rural o la vereda,  para el caso de Saucío, Chocontá Cundinamarca. Sin olvidar otros temas del libro como son la descripción del proceso de poblamiento y de la relación del campesino con la tierra. Frente al concepto de vereda:
“..la vereda o vecindario de Saucío puede definirse en función de cinco factores ecológicos: 1) la vereda es un grupo social, etnocéntrico, autónomo y politicamente cohesivo; 2) al mismo tiempo, depende de la sede municipal para la satisfacción de necesidades religiosa, económicas y administrativas: 3) tiene intercambio ecológico de sostenimiento con una región rural topográficamente delimitada; y 5) se identifica por un toponímico funcional”
Durante los debates generados por la reforma agraria de Lleras Restrepo a finales de los 50, Fals Borda planteaba reflexiones propositivas que cuestionaban las bases del ordenamiento territorial en el sector rural. En los debates dijo que la reforma agraria tenia que resolver los siguientes problemas (ver ensayo titulado “La reforma agraria”):
                  La distribución de la propiedad: Fijar limites para los latifundios y los minifundios. Realizar una política de redistribución de la tierra pasa por establecer limites maximos para la acumulación de la tierra, y unos limites minimos en la aotmiazación de la misma. El latifundio impide el acceso de los campesinos a los medios de producción, y la atomización no se obtiene de una pequeña porcion lo suficiente para subsistir.
                  El problema de los arrendamientos rústicos: Los altos costos de la tierra, a parte de impedir el acceso de los campesinos en la apropiación de los medios de producción, los obligaba a pagar arriendos costosos que no facilitaban el desarrollo de sus actividades económicas.
                  El registro y el deslinde de la propiedad rural: La falta de control en la titulación y delimitación de las tierras es fuente de conflictos, de allí la importancia de definir con claridad los mecanismos para el registro de propiedad y sus delimitación con las tierras vecinas
                  El problema de la productividad de la tierra y la capacitación del hombre: La concrentación de la tierra ha llevado a una baja productividad de la misma, por lo que los lotes baldios deben ser aprovechados económicamente. Para mejorar las condiciones económicas de los campesinos, el Estado debe incentivar buenas prácticas agropecuarias en la formación de la población rural.
                  Autonomía regional y acción comunal: Aunque no menciona la descentralización en este punto, pues de este concepto no se hablaba en el país en aquella fecha, Fals Borda invitaba a garantizar una mayor autonomía de los municipios para la administración de sus territorios y a la organización campesina para la resolución de problemas locales.
Con la publicación de “Mompox y Loba”, primer tomo de la obra “Historia doble de la costa” podemos hablar de un segundo periodo: la elaboración de la idea de ordenamiento territorial en el pensamiento de Fals Borda. Este periodo de elaboración de la idea culmina con la exposición que presentó en el Foro Regional de Mompox en 1987 “Ordenamiento territorial e integración regional en Colombia”. Posteriormente, se puede hablar del último periodo de fundamentación y defensa del ordenamiento territorial.
El proceso de elaboración de la idea de ordenamiento territorial estuvo marcado por el trabajo “Historia Doble de la Costa”, con el cual se postulan preliminarmente los conceptos de región y provinicia.  Gracias a este trabajo es que Fals Borda comprende la importancia de abordar las dinámicas territoriales para hacer análisis de la práctica política, las ideologías y planificación social y económica (Mompox y Loba).
A finales de los 70 y la década de los 80 muchos trabajos empezaron a confluir en la critica al esquema territorial del país, ya sea través de diferentes planteamientos como la descentralización, la democracia local, la crítica al modelo de desarrollo, etc (Orlando Fals Borda señala muchos de estos trabajos en su artículo “El reordenamiento terrritorial: intinerario de una idea”). Sin olvidar que a nivel mundial el Ordenamiento Territorial como disciplina científica e instrumento de planificación estaba constituyéndose en las dinámicas político-administrativas. Al respecto, se puede consultar la Carta Europea de Ordenación Territorial de 1983.
En aquel entonces, los conceptos de región y provincia eran vistos por Fals Borda desde el concepto de “formación social”, como un conjunto de expresiones geográficas, políticas y temporales concretas, que se mueven en un espacio y en una estructura social determinada (Mompox y Loba, p. 18b). En este sentido, las regiones son elementos dinámicos de una formación social, ya sea ésta última de tipo colonial o de un orden como el estado-nación. Elemento dinámico como espacio geográfico claramente delimitado porque hay cierta homogeneidad ecológica y socio-cultural.  La historicidad de la región como tal presneta a su interior un desarrollo desigual que plantea cierta diferencia, donde hay agrupamientos específicos y comunidades que persisten a los dieferentes cambios de formaciones sociales. (Mompox y Loba).